jueves, 20 de octubre de 2011

Mi querido vecino: callejero, quesófilo y choricero

Hacerle caso a mi intuición siempre me conduce a una desagradable realidad. ¿Por qué nunca me puede traer gratas consecuencias?, ¿por qué ese "tufillo" imaginario termina materializándose en hedor a visible cloaca?. Desde luego, los hurones y los ratones se parecen bastante. En este caso, el queso parece llevárselo el vecino del tercero- antiguo presidente de esta, nuestra comunidad- mañana saldré de dudas. Todo es bastante sospechoso, pero como apenas hay comunicación entre los propietarios porque todos trabajamos (menos él) y no solemos coincidir...